Existen tres señales de que usted está experimentando alopecia o pérdida capilar si el área donde se hace la carrera con el cepillo o la peinilla se está anchando, si tiene zonas calvas o si se le están cayendo más de 125 hebras de cabello al día. Existen unos cuantos tipos específicos de pérdida capilar y varias posibles causas.
La pérdida capilar (alopecia) puede afectar solo el cuero cabelludo o el cuerpo entero y puede ser temporal o permanente. La alopecia ocurriría por herencia, cambios hormonales, condiciones médicas o como una consecuencia normal del envejecimiento. Cualquier persona puede sufrir de alopecia, pero es más común en los hombres.
Conozca aquí cómo crece el pelo en los humanos, las causas de la pérdida capilar prematura y algunas sugerencias para prevenir y tratarla.
Fases del crecimiento capilar
Img. Clínica de Cleveland
Primero hay que entender que el crecimiento capilar atraviesa tres fases que son la anágena (de crecimiento) esta puede durar de dos a ocho años y generalmente, se refiere al 85%-90% del cabello en la cabeza. Durante esta fase, el bulbo piloso que se localiza en la base del folículo, se regenera y produce un cabello. Este cabello crece 1 cm al mes aproximadamente.
La fase catágena (de transición) es el final de la fase de producción de la fibra capilar, cuando el folículo se retrae de la superficie del cuero cabelludo. Tiene una duración de 2-3 semanas. Luego, el cabello deja de crecer y permanece en esta fase durante unas semanas antes de pasar a la siguiente fase.
La fase telógena (de descanso) El cabello ya no crece, pero permanece unido al folículo durante aproximadamente 3 meses. Después de este período, el pelo se cae cuando nos lo lavamos o lo cepillamos. Ahora puede empezar una nueva fase anágena.
Cada cabello crece de un folículo piloso y cada folículo tiene su propio ciclo, es decir, cada cabello crece independiente del resto de cabellos. De esta manera, nuestro cabello no crece de manera continua sino en ciclos sucesivos. El 90% de nuestros cabellos están en una continua fase de crecimiento, mientras que el 10% está en fase de expulsión. Cada día perdemos de 50-100 cabellos después de un ciclo de vida de 2-7 años donde los cabellos se sustituyen por otros nuevos. Cada folículo piloso produce un nuevo cabello en su fase de crecimiento con un total de 25 a 30 ciclos durante nuestra vida que pueden verse interrumpidos por alteraciones hormonales.
Tipos de pérdida de cabello
Existen tres formas de pérdida de cabello en las mujeres
Alopecia Efluvio anágeno, causado por medicamentos que envenenan el crecimiento capilar sucede durante la quimioterapia.
Alopecia Efluvio telógeno causado por un incremento de folículos capilares que llegan al mismo tiempo a la fase telógena, es decir, en la fase cuando el cabello se cae.
Alopecia androgénica. Es el tipo más común donde las hebras capilares se vuelven frágiles en la parte superior de la cabeza y a los lados de la coronilla.
Posibles causas para la pérdida de cabello (hombres y mujeres)
El primer tipo de problema está relacionado con alteraciones hormonales. En el caso de los hombres se le atribuye al exceso de la enzima 5-alfa reductasa tipo 2 que se convierte en DHT (hormona dihidrotestosterona). La DHT es una hormona que proviene de la testosterona, es decir, un metabolito de la testosterona y es varias veces más activa en todas las funciones que va a cumplir, incluso que la testosterona misma.
Al medir en la sangre los valores de DHT no estarán particularmente elevados en la persona que está perdiendo pelo en comparación con una persona que no lo padezca de forma prematura, pero sí los niveles de la enzima 5 alfa reductasa tipo 2. Hasta ahora existe una teoría que la persona al padecer calvicie prematura ha de tener una sensibilidad aumentada a los receptores de DHT en el cuero cabelludo y en la próstata, por ejemplo.
El segundo tipo de alteración hormonal es cuando disminuyen los niveles de estrógeno en las mujeres. En este caso la testosterona llega al folículo capilar donde la enzima aromatasa fabrica estrógenos. Al llegar a la menopausia que en teoría se manifiesta en un adelgazamiento (debilitamiento) de los folículos pilosos, supone una disminución en la actividad de los estrógenos. Se diría que puede ser la causa, pero no es seguro.
En este sentido es importante entender primero que la mayoría de los síntomas de menopausia en la mujer van a darse no por la disminución en los niveles de estrógeno y progesterona sino por el aumento de los estimulantes que son la hormona folículo estimulante (FSH) y la hormona Luteinizante (HL) quienes además son las responsables de provocar los sofocos durante la menopausia y otros síntomas que acompañan este momento en la vida de la mujer.
Tanto la hormona DHT como la FSH y HL, además, estrógenos y progesterona en la mujer, producirán un cambio en dos lugares específicos del cuerpo: en la hipófisis que es una glándula ubicada en el cerebro y donde se producen sustancias como la FSH y la HL en la mujer; y en el hígado donde la mayoría de las hormonas sexuales tanto de hombres como mujeres se llevan a cabo y eventualmente puede ser cruciales para mejorar estas condiciones.
La segunda causa o tipo de problema ocurre por alteraciones nutricionales debido a dietas o restricciones de ciertos nutrientes como vitamina C; vitaminas del grupo B como la vitamina Biotina o B7; de minerales como sílice, manganeso, cobre y zinc, pero, sobre todo, colágeno.
Actualmente, se comercia el colágeno de forma hidrolizada provieniente de productos vacunos. En mi artículo sobre el colágeno puede constatar que existen hasta 28 clases, las que tienen que ver con una producción saludable de folículos capilares son el 1, 3 y hasta el 5, así que, si usted consume colágeno, asegúrese de que es de la clase que necesita y de fuentes confiables. Más información aquí
La tercera clase o tipo de problema que puede afectar su salud capilar tiene que ver con la inflamación y los niveles de estrés que usted maneje. Entre más inflamación se tenga a nivel de dermis y tejido celular subcutáneo, más daño se impone a los folículos pilosos impidiendo que las células madre renueven suficientes folículos pilosos y que estos últimos no se deterioren o degraden definitivamente.
Suplementos que pueden ayudarle a prevenir la pérdida excesiva de capilares.
Según el doctor argentino Sebastián La Rosa, especialista en medicina alternativa y ortomolecular, “en caso de alopecia masculina derivada en teoría de alteraciones en la DHT, se pueden tomar algunos suplementos que ayudarían a activar el metabolismo adecuado de la DHT” a saber,
Palmito silvestre (Serenoa Repens) o raw palmetto
Pygeum africanum, prunus africana o ciruelo africano
Ashwagandha
Rhodiola
Sílice
Omega-3
Aceites esenciales
Las dos primeras plantas se utilizan como bloqueadores de la DHT, aunque no se considera buena idea bloquear la DHT si no se está seguro de que es realmente la causa de la alopecia. Hay que recordar que la hormona DHT es también la hormona que atribuye las características masculinas en el hombre.
La Ashwagandha es una planta muy utilizada en medicina Ayurveda la cual aumenta los niveles de testosterona al tiempo que reduce el DHT (porque acelera el metabolismo de la última) y disminuye los efectos negativos del bloqueo de las otras dos plantas.
La Rhodiola y dos sustancias adaptógenas (que puede actuar como antioxidante o como estimulante del metabolismo hepático u otro factor, dependiendo de lo que el cuerpo esté necesitando) y que esta planta contiene serían las responsables de equilibrar las hormonas involucradas, en este caso de la pérdida capilar.
Una de las funciones principales de la Rhodiola es en las glándulas suprarrenales pues ayuda a disminuir el impacto del estrés en el organismo.
Así mismo, los complejos vitamínicos de buena calidad contienen una concentración adecuada de complejo B y algunos aminoácidos esenciales para detener la caída del pelo o mejor, para la renovación de folículos capilares, entre ellos, la metionina y la colina.
La sílice es esencial para formar una buena estructura capilar, reducir la inflamación del cuero cabelludo en caso de tener caspa. La caspa en sí es un indicador de inflamación en el cuero cabelludo, específicamente en los folículos pilosos.
Ácidos grasos Omega-3 en concentración de 1 gramo al día o más, debido a que el estilo de vida y alimentación que llevamos ha estropeado la proporción que debemos mantener en el consumo de Ácidos grasos esenciales dando prioridad a los Omega-6 y rompiendo este delicado equilibrio. Mientras no se equilibren estas proporciones, es difícil controlar la caída del pelo si no es debido a un desajuste hormonal. Incluso, si la pérdida capilar se debe a alteraciones hormonales, los ácidos grasos Omega-3 ayudan a que el cabello crezca de manera sana y no se deterioren los folículos pilosos.
Los aceites esenciales ofrecen una alternativa natural que no va a bloquear la función normal de la hormona testosterona. El aceite de romero es una de las opciones que tiene este efecto: mezclar unas 10-12 gotas de este aceite con un poco de aceite de coco fraccionado y frotarlo en el cuero cabelludo va a disminuir la inflamación y a mejorar la función de otras glándulas, es decir, es un doble beneficio porque trabaja a nivel local disminuyendo inflamación y al tiempo equilibrando función hormonal.
Los aceites esenciales especialmente efectivos para las mujeres y que pueden equilibrar la caída del pelo como consecuencia de un proceso posmenopáusico al regular la función de estrógenos y progesterona, son el aceite de salvia y el de cedro. Se recomiendan mezclar 10-12 gotas de cada uno de estos aceites en una pequeña cantidad de aceite d coco y frotarlo en el cuero cabelludo. Si se desea utilizar de forma regular, 30 gotas de alguno de estos aceites disueltas en 50 ml de aceite de coco fraccionado para aplicar 3-4 veces por semana y dejarlo 20 minutos y luego enjuagar de forma normal.
Higiene orgánica
En caso de que sienta que la progresión en la pérdida de cabello es muy rápida o en demasiadas cantidades, se recomienda una limpieza de intestino delgado y una limpieza hepática. Una desintoxicación de hígado siempre es positiva puesto que el hígado se encarga de más de 500 funciones en el cuerpo y entre ellas, del equilibrio hormonal, principalmente de hormonas sexuales como testosterona, DHT, estrógenos y progesterona. Así mismo, el hígado al estar limpio mejora la actividad inmunológica del organismo, disminuye inflamación y como se dijo más arriba, equilibra la función hormonal.
Al cuidar la función hepática, es de especial importancia la metilación, es decir, una de las vías de eliminación de hormonas y tóxicos de la segunda fase de la desintoxicación hepática. Si la vía de metilación no funciona de forma adecuada no se podrán eliminar de forma eficiente hormonas y toxinas ni histaminas u hormonas del estrés. Como consecuencia habrá tendencia a tener problemas de ansiedad, depresión, intolerancias, dolores de cabeza, migrañas, dolores crónicos o desequilibrios hormonales.
Normalmente una prueba de sangre que muestre niveles de homocisteína podrá esclarecer si su metilación está rezagada o sobrecargada. Además, si es usted una persona perfeccionista, autoexigente, planificadora, obsesiva y bruxa (apretar los dientes durante la noche), es posible que la metilación en su organismo esté rezagada.
Hábitos y alimentos que le permiten tener un hígado saludable
Ayuno
En mi artículo sobre el ayuno puede conocer los inmensos beneficios para la salud que aporta esta práctica. Así mismo, verá que existen varias clases de ayuno y escoger cuál es la que más se adapta a su estilo de vida y necesidades actuales.
El ayuno intermitente es una manera muy positiva de ayudarle a su digestión, mejorar su salud y optimizar la depuración hepática.
Verduras crucíferas
Las coles de Bruselas, el brócoli, la coliflor, repollo y kale contienen fitonutrientes, carotenoides y flavonoides que ayudan a neutralizar toxinas. Las crucíferas también contienen glucosinolatos (compuestos naturales del metabolismo secundario de las plantas y se hidrolizan por la enzima mirosinasa para dar lugar a los isotiocianatos que constituyen las moléculas activas. Estas moléculas contribuyen a la defensa de las plantas frente a insectos y patógenos, pero también tienen propiedades beneficiosas para la salud humana debido a su potencial mecanismo de protección de infecciones y al cáncer. (fuente)
Remolachas
La remolacha ayuda de forma natural a limpiar la sangre. Tienen elevado contenido de folato, pectina betalainas y betaína. Mejora la actividad enzimática y estimula el flujo de la bilis la cual, descompone desechos tóxicos del organismo y ayuda a eliminarlos del cuerpo.
La pectina que se encuentra en las remolachas es una forma soluble con propiedades depurativas. La fibra y los nutrientes presentes en las remolachas ayuda a eliminar toxinas que a menudo se almacenan en el hígado o han sido excretadas en el tracto intestinal por medio de la bilis.
Frutos cítricos
Tanto limones amarillos como verdes, así como las toronjas contienen elevadas concentraciones de vitamina C y bioflavonoides. Estos nutrientes ayudan a sentirse energizado, alcalinizar el organismo, mejorar la desintoxicación del hígado y a reducir la inflamación.
Una buena manera de mantener la salud de su hígado es exprimir medio limón y mezclarlo con agua y 1 cucharada de vinagre de manzana en la mañana.
Verduras de hojas verdes
Algunos de los vegetales de hojas verdes con más nutrientes son la espinaca, el kale, la rúcula, las acelgas y el repollo chino. Todos son buenas fuentes de potasio, manganeso y magnesio. Los vegetales de hojas verdes contienen, además, clorofila que ayuda a depurar la sangre y ayuda al hígado a neutralizar metales pesados, químicos tóxicos y pesticidas.
Frutos del bosque
Los frutos del bosque tales como los arándanos azules y arándanos rojos contienen vitaminas, minerales y fitonutrientes antioxidantes llamados antocianinas que les dan a los frutos rojos sus colores distintivos. Las antocianinas han demostrado proporcionar una actividad anti carcinogénica, inmuno-protectora y antiinflamatoria, así como de proteger al hígado y de ayudarle a regenerar sus células hepáticas. (fuente)
Hierbas
Hierbas como el cardo mariano, el jengibre, la raíz de diente de león, cilantro, ajo y cúrcuma son potentes depuradores. La cúrcuma especialmente ha mostrado mejorar la función hepática por sus propiedades regeneradoras y protectoras. Se cree que la cúrcuma puede reducir el daño por radicales libres, apoyar la producción de bilis que ayuda a digerir grasas y a excretar toxinas liposolubles. (fuente)
Aguacate
El aguacate es una muy buena fuente alimenticia de glutatión, un poderoso antioxidante que se necesita para filtrar sustancias tóxicas en el organismo y proteger las células hepáticas de deterioro. Consumir aguacate junto con alimentos ricos en vitamina C como limones puede incrementar la absorción de glutatión.
El aguacate contiene además minerales y fitoquímicos como caroteno y luteína. Contiene fibra y potasio que ayudan al proceso depurativo.
Café y té verde
Estudios han demostrado que el café ofrece un efecto protector contra el desarrollo de la cirrosis y del carcinoma hepato celular. (fuente) Así mismo, el consumo de café ha sido asociado con una disminución en el riesgo de muerte en personas con enfermedad crónica hepática, sobre todo en aquellas personas que consumieron más de dos tazas al día. Estos beneficios se relacionan con la prevención de la acumulación de grasa y colágeno que son dos de los principales indicadores para determinar la enfermedad hepática. (fuente)
El té verde por su parte ha demostrado en estudios ser particularmente benéfico para le hígado. El Té verde es rico en antioxidantes polifenoles que son más potentes que la vitamina C o E y proporcionan beneficios para la salud. El té verde también ha mostrado mejorar los niveles enzimáticos y reducir estrés oxidativo, así como depósitos de grasa. (fuente) Parece que los efectos preventivos del té verde contra el cáncer de hígado han sido cuando los participantes de un estudio consumieron 5 o más tazas de té verde al día.
Nueces
Las nueces, particularmente, las nueces del nogal han demostrado proporcionar beneficios al hígado. Las nueces del nogal contienen el aminoácido arginina, necesario para eliminar del organismo el amoniaco. Estas nueces también son buena fuente de glutatión y ácidos grasos omega-3 que ayudan al proceso depurativo.
Chlorella y espirulina
La chlorella es un alga de una sola célula cuya pared celular es bastante resistente. La acción de la chlorella es potente ya que a su pared celular se adhieren metales pesados y otras toxinas para ser eliminadas del cuerpo. Además, posee polisacáridos complejos que realzan la función inmunitaria.
La espirulina es también un alga verde azulada rica en proteína, minerales y antioxidantes. Apoya el sistema inmunológico y protege el hígado de deterioro al adherir toxinas. (fuente) La espirulina tiene una potente actividad antioxidante que protege las células de daño oxidativo.
Aceitunas y aceite de olivas
El aceite de olivas es rico en ácidos grasos mono-insaturados cuyos efectos son muy positivos. Algunos estudios han demostrados que el consumo de aceite de olivas puede mejorar los niveles enzimáticos y reducir la acumulación de grasa en el hígado.
Estudios demuestran que el aceite de oliva podría aumentar los niveles de adiponectina. La adiponectina es una hormona proteica que interviene en la regulación de los niveles de glucosa y la descomposición de los ácidos grasos. Los niveles bajos de adiponectina se asocian a numerosos problemas de salud, como la inflamación, las anomalías lipídicas y la enfermedad del hígado graso no alcohólico. (fuente)
Conclusión
La perdida capilar prematura puede obedecer a diferentes causas. En caso de estar perdiendo más de 125 cabellos al día y siente que alguna de las causas expuestas podría atribuirse a su situación, es recomendable que consulte con un(a) dermatólogo(a) y de manera conjunta escojan el tipo de tratamiento que mejor le conviene. Existen diferentes alternativas, tanto naturales como químicas. En este artículo yo he tratado de exponer opciones naturales y preventivas pero usted decidirá qué es lo que más le conviene.